Enhorabuena, Década Prodigiosa

Foto: Tomada de internet
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La llamada Década Prodigiosa, fue algo que indiscutiblemente caló muy hondo en toda una generación, y en casi todo el mundo. Su promoción actual, es también una manera de preservar la memoria espiritual y la historia más reciente de la música, de una época.
Cuba no fue una excepción, todo lo contrario. En la música tuvimos grandes exponentes, reconocidos a nivel internacional inclusive.
Hace ya algunos años, en 1995, exactamente en el mes de diciembre, se produjo en nuestra ciudad un intercambio entre amigos. En esta reunión casual, surgió la idea de crear un club, donde se pudiera escuchar y bailar los ritmos de esa época, con los que una buena cantidad de jóvenes bailamos y disfrutamos por aquel entonces; y con los cuales parte de la juventud actual todavía se identifica. Se creó una directiva, estatutos, y hasta se recaudaba una cuota monetaria mensual, abonada por cada miembro; esto último para sufragar gastos en los que se incurría en determinadas fechas. Pero aquel club inicial se fue multiplicando en la ciudad y fueron surgiendo otros y, desde luego, su membresía también fue en aumento.
Este fenómeno se produjo también en otras partes del país y  aquí en Camagüey, con la ayuda y colaboración de diversos organismos, instituciones, asociaciones; tuvimos la posibilidad de celebrar dos encuentros nacionales de clubes de la Década Prodigiosa, en los que se realizaron encuentros teóricos y se promovió el movimiento en todas sus manifestaciones, pues se dialogó sobre infinidad de aspectos que muchos desconocíamos.
Hoy, a la vuelta de casi veinte nueve años de haber sido formado el primero de estos clubes en la ciudad, ya se cuenta con más de seis, y todos persiguen el mismo propósito: la promoción y el consumo de la música y los bailes de esa época, la diversión sana y la preservación de esa parte de la historia común, de muchos de los que hoy peinamos canas.

Por eso mi admiración y respeto para los que tuvieron aquella feliz idea en 1995, y, desde luego, también mi agradecimiento por haberme admitido a ser parte activa del mismo desde inicios de 1996.

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