Con siete balazos y cuatro machetazos cedió el cuerpo del mambí por orden del entonces presidente de la República, Tomás Estrada Palma, el 22 de agosto de 1906. Quintín Banderas se alzó contra su relección en la Guerrita de agosto en 1906 liderada por los liberales.

– ¿Van a matarme así? – dijo y buscó con la vista, como quien espera ayuda, a los hombres ocultos en la casa. Luego del primer tiro, con un machetazo, de un solo tajo le arrancaron de raíz la oreja izquierda.

El capellán Felipe Augusto Caballero

Solo un carruaje ocupado por la viuda del General siguió al féretro. El presidente de la República aseguró su sepultura en un lugar ignoto. Evitaba así los honores. Sin embargo, el cura y capellán de la necrópolis de Colón, Felipe Augusto Caballero, le dijo a la viuda que regresara dos días después.

A su regreso, el capellán la llevó al lugar de enterramiento. Allí se había colocado una cruz y se leía E.P.D. Felipe Augusto Caballero.

Pensamiento político de Quintín Banderas

Independentista, anticolonialista, invariable contra la Enmienda Platt, antianexionista. En consecuencia, querido, admirado por el pueblo. Razones suficientes para ser objeto de antipatía para sus contrarios.

Es significativo que Estrada Palma “encaminó” al negro General de Tres Guerras y cinco constituciones al frente de una sección de recogida de basura en las calles de La Habana. Durante las elecciones cobraba 100 pesos. Luego de electo, el salario bajó a 75.

Las investigadoras Natalia Bolívar y Natalia del Río socializan el documento:

Febrero 14 de 1906

Honorable Sr. Presidente de la República

Querido y respetado Sr. Presidente:

…También he procurarlo verlo a usted a fin de exponerle mis quejas, y se me ha               dificultado igualmente, si bien entiendo que sus múltiples ocupaciones, de orden más elevado, no la dejarían tiempo muchas veces ni para atender a su propia familia.

… ¿es justo que se haya rebajado mi sueldo, que la mitad de él hay que emplearlo en la casa, por que por prestigio del mismo Ejército yo no debo ocupar un cubil o una guardia (sic), sino vivir con relativa decencia?

…le pido a usted justicia y que repare lo que casi puede estimarse como una ofensa… (2008, p.16).

Quintín Banderas y Puerto Príncipe, Camagüey

• El investigador Julio Rensoli apunta que Quintín estuvo entre los alzados con Joaquín de Agüero, sublevación que se extendió hasta el norte de la provincia oriental.
• En el mes de noviembre de 1875, llega Quintín a Villa Clara. A los nueve meses es ascendido a comandante. En su paso hacia Oriente interviene en varias acciones combativas en Puerto Príncipe, Camagüey.
• Perteneció a la Logia masónica de Guáimaro.
• En la paz asistió a la academia del abogado camagüeyano asentado en la ciudad de La Habana, Miguel Ángel Céspedes, cuando lo sorprendió la Guerrita de agosto.

Legado

El temor de Tomás Estrada Palma se multiplica. La Unión de Escritores de Cuba, la Comisión Aponte, la Fundación Nicolás Guillén, entre otras organizaciones, escuelas aledañas y el activismo social se articulan con el Programa Nacional contra el racismo y la discriminación racial para impulsar el legado de Quintín Banderas. En su última morada en la necrópolis de Colón y en el monumento erigido a su memoria en el parque Trillo, La Habana, son espacios de conmemoración y honra perennes.

Bibliografía

– Bolívar, Natalia y Natalia del Río (2008) La muerte es principio, no fin. Quintín Banderas. Editorial José Martí. Instituto Cubano del Libro, La Habana, Cuba.

– Padrón Valdés, Abelardo (2006) Quintín Banderas: General de tres Guerras. Editorial Ciencias Sociales, La Habana, Cuba.