Fueron mayoritariamente jóvenes los que entonces no vacilaron, no titubearon; se enfrentaron con valentía y dignidad a la tiranía que desangraba al país. Pasaron a engrosar las filas de los héroes eternos que la Patria acogió en su seno, uno de ellos fue el joven camagüeyano: Álvaro Morell Álvarez (Charles).
Nació el 5 de enero de 1936, en la ciudad de Camagüey. Hijo de Álvaro y Concepción. Cursó la enseñanza primaria en Camagüey. Lector ávido de los textos de Martí. Desde muy temprana edad se vio en Charles su inquietud y preocupación ante toda injusticia y maltratos. En el año 1950 matriculó en el Instituto de Segunda Enseñanza de la ciudad.
Labor revolucionaria
Su accionar por la causa revolucionaria comienza en medio del gobierno de Carlos Prío Socarrás, al que se enfrenta con vigor hasta que sobreviene el golpe de estado del 10 de marzo de 1952, contra el cual se manifiesta de forma abierta y comienza su lucha contra la sangrienta y brutal tiranía de Fulgencio Batista, que a diario enlutaba a muchos hogares cubanos.
Así se inicia su etapa de ascendente formación revolucionaria. Dada su capacitación política, entiende al instante el espíritu del asalto al cuartel Moncada, abraza aquella causa y ve en Fidel el líder esperado. Se convierte en ferviente admirador de la heroica gesta, capta a los mejores muchachos del instituto para respaldar las ideas del patriótico acontecimiento y estrecha vínculos con otros jóvenes estudiantes revolucionarios, como Jesús Suárez Gayol, Cándido González Morales y Rodolfo Ramírez Esquivel.
El joven camagüeyano con una fecunda trayectoria revolucionaria a favor de la causa de la libertad y la justicia social, sufrió los rigores de la persecución, los golpes, la cárcel y el exilio, con valor, lealtad y decisión a toda prueba.
Fue uno de los principales dirigentes del estudiantado agramontino y miembro del movimiento 26 de julio. Después de arraigarse la lucha armada en la Sierra Maestra, contrae nuevas y mayores responsabilidades, trata inútilmente de incorporarse a la Sierra, perseguido implacablemente por la tiranía de Batista, marcha al exilio.
Cuando intentaba regresar a la patria para tomar su puesto en la lucha armada contra la tiranía, el barco expedicionario sufre una avería en una de las hélices, “Charles” es el primero que se brinda para reparar el desperfecto. El valeroso revolucionario se lanzó al agua con botas y ropas; y desapareció en las turbulentas aguas del Golfo de México. Murió con solo 22 años, de edad, el 26 de abril de 1958.
Tributo y recordación
Con el nombre de este heroico joven se honra el Instituto Preuniversitario Urbano, Álvaro Morell, otrora Instituto de Segunda Enseñanza, donde estudió; y donde hoy se forman los jóvenes que como él, tienen el compromiso de prepararse para garantizar la continuidad histórica de la Revolución, esa que con su valentía ayudó a liberar y por la cual dio la vida.
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Bibliografía: Ariel Noa, Álvaro Morell Álvarez. Bohemia, Junio 21, 1968.
Ariel García Suárez, “Una joven vida consagrada a la Revolución”. Granma, Abril 26, 1978.
