Duele ver grietas, franjas de indolencia, indisciplinas que marcan céntricas calles de la ciudad; vecinos que en ellas han resuelto sus individualidades y al final se olvidan que la vía pública también forma parte de la urbe a la que pertenecen.
Las calles San Clemente, San Pablo y Lugareño fueron las protagonistas del lente de nuestro fotógrafo, que a través de estas instantáneas expone la forma irresponsable de ciudadanos e instituciones encargadas del tema.