Por: Alejandro García Gutiérrez y Sheila Barros Fals
El impacto de la Covid 19 fue mucho mayor en este 2021, sin embargo, eso no significó que la Oficina del Historiador detuviera sus labores. Algunos de sus trabajadores se adecuaron al trabajo a distancia, otros se vincularon completamente a los quehaceres de enfrentamiento a la pandemia a través de la pesquisa activa y el apoyo a la campaña de vacunación.
Las labores constructivas avanzaron a pesar de las limitaciones; sitios como el Museo Plaza de la Revolución Ignacio Agramonte, el Centro de Interpretación del Cementerio, las instalaciones en el edificio sede que servirán de soporte al desarrollo del uso de nuevas tecnologías y El Museo Ferroviario fueron las obras protagonistas en este período y están casi listas para su inauguración en 2022, las tres últimas ejecutadas con el financiamiento de la Agencia Suiza para la cooperación y el desarrollo, Cosude.
Estos sitios y los proyectos que en ellos se llevarán a cabo, son de gran interés para la provincia y el país, por ello el Viceprimer Ministro de la República, Jorge Luis Perdomo escuchó de voz de José Rodríguez Barreras, director de la Oficina del Historiador, cómo marchan estos procesos.
Las intervenciones constructivas no solo se realizaron en sitios con carácter históricos o socicultural, sino que la labor social tuvo un peso importante. Ejemplos de ello fueron las intervenciones en la Bodega el pozo de Gracia y la en la vivienda de una camagüeyana, madre de cuatro hijos, que perdió gran parte de la estructura de su casa tras un incendio.
Colaboración y proyectos
Este 2021 también fue fructífero en cuanto a los proyectos de colaboración, el de Industrias Creativas, cofinanciado por la unión europea y el instituto portugués Camoes, ejecutados por las organizaciones no gubernamentales Care Francia y oikos además de la oficina del historiador no se detuvo y se dieron importantes pasos de avance en la organización del mismo a través del Primer Taller Nacional de Industrias Creativas y con la visita en noviembre de Jordi Teserrás Juan, presidente en España del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios.
De igual manera el proyecto “Apoyo al desarrollo integral de niños y niñas con trastorno del Espectro Autista, pertenecientes a la escuela Héroes del Moncada de Camagüey” finalizó con la presencia de Hirata Kenji, embajador Japón en nuestro país, Mark Kuster, fundador de Camaquito y el director de la Oficina del Historiador de esta ciudad, representantes estos de las tres entidades que financiaron el proyecto.
Para comunicar el patrimonio
La gestión de la comunicación tampoco se detuvo y ajustó sus dinámicas al contexto vigente. Audiovisuales Príncipes se mantuvo operativo y realizó diversos materiales televisivos y radiofónicos, en función de la preservación de la memoria histórica y en apoyo a las acciones del Consejo de defensa provincial y el Grupo temporal de trabajo. A través del sitio web y las plataformas digitales también se desarrolló una importante labor comunicativa, lo que sirvió de escenario para la realización de eventos, actividades, jornadas y visibilizó no solo el trabajo de la institución, sino también las medidas adoptadas y otras importantes disposiciones.
El escenario virtual jugó un rol protagónico en la realización de eventos como la semana de la cultura camagüeyana y la NOVENA edición de la Jornada por la Diversidad Cultural para el diálogo y el desarrollo, así como la parrilla de actividades emitidas durante el verano y la Jornada por la Cultura cubana.
Cerrando el año
En noviembre, en el contexto de las celebraciones por el aniversario de Declaratoria del título de ciudad se inauguró la exposición fotográfica colectiva 12 y a finales de año se presentaron los números 23 y 24 de la revista Senderos, el primero dedicado a la Premio Nacional de Historia Elda Cento Gómez y el segundo a El Mayor Ignacio Agramonte, ambas exclusivamente por esta ocasión en formato digital.
Con estas y otras acciones de no menos impacto como la continuidad del proyecto de aulas patrimoniales, cerró un año de mucho trabajo en la Oficina del Historiador de la ciudad de Camagüey, un año en el que, a pesar de las afectaciones de la pandemia, los trabajadores de esta institución demostraron que la Revolución siempre puede contar con ellos sin importar la dificultad de los momentos y pusieron todo su empeño para seguir con la noble labor que acomete esta institución, próxima a cumplir sus 25 años de fundada.