Poder disfrutar de la paz ciudadana, de que nuestros niños corran felices en un parque y que se eduquen en sus escuelas sin sobresaltos, es un privilegio que se debe en gran medida, a la labor de los centinelas del silencio, me refiero a los órganos de la Seguridad del Estado.
La Contrainteligencia celebra 63 años de su creación por Fidel, un año después, surge el Ministerio del Interior (MININT) que este 6 de junio arriba a su aniversario 62.
Por la gratitud que debemos a estos hombre y mujeres que velan por nuestros sueños y por la patria día a día, salí a buscar una historia real, una de las que pasan a nuestro lado calladas y que pueden constarle la vida a su protagonista.
La historia
El personaje central de esta crónica es Santo, pero no por milagros sino por sus acciones, les presento al Mayor retirado del sector: Santos Eliecer Huerta Muñoz, quien al jubilarse de su labor militar encontró una manera hermosa para continuar protegiendo a la ciudadanía.
Para esa finalidad, desde hace unos meses es el responsable de la Sala Museo de los Órganos de la Seguridad del Estado en Camagüey, que lleva adelante un programa con las escuelas del reparto La Caridad titulado por las rutas de Martí y Fidel.
Dónde está la Sala Museo
Me sorprendió la Salita, de camino por la Avenida de la Libertad, al llegar al final doblando a la izquierda a la calle Dolores Betancourt y sin bajar la acera, en el número 18, allí te sorprenderá una fachada discreta con un cartel que invita a entrar desde hace unos 5 años.
Sencilla y pequeña, sorprende con hechos y sucesos que conmueven. El guión museográfico está dividido en 5 etapas, que agrupa pruebas e imágenes desgarradoras de sucesos terroristas que desde 1959 hasta 2008, han sido preparados por organizaciones norteamericanas, para desestabilizar la Revolución, sin medir el costo de sus acciones.
Entre los diversos materiales que pude apreciar con mi visita a la Sala, me perturbaron las fotografías del ¨Caso Granada¨, un sabotaje acaecido en 1969 en el municipio Vertientes, cuando unos niños jugaban en el campo sobre una loma de tierra, que ocultaba un cargamento de granadas de mano, para una operación del movimiento norteamericano Demócrata-cristiano, con el fin de entorpecer la zafra del 70.
Los tres niños murieron y sus cuerpos destrozados yacen alrededor de la explosión. Aunque el cabecilla fue atrapado y cumplió condena, la vida de aquello tres inocentes no pudo regresar.
Otros casos de terrorismo en el territorio agramontino, fueron descubiertos por la labor de los agentes, algunos pudieron evitar sus consecuencias nefastas para la población y la economía, otros al menos encontraron a los culpables y los entregaron a los tribunales.
Casos resueltos
Muchos casos figuran en los archivos, aún en secreto se resuelven algunos, otros ya cerrados, como los que muestra el salón, nos dan la medida de cuanto ha conspirado el enemigo contra la paz de esta tierra.
Bombas e incendios en escuelas, en almacenes de tejidos y de víveres, contaminaciones en alimentos y cultivos, ocupación de explosivos, armas, venenos, sabotajes en líneas férreas y centrales azucareros, introducción de enfermedades en el ganado; son algunas muestras de lo que el trabajo mancomunado del MININT ha podido evitar.
El proyecto
Luego de conversar sobre los diversos casos, apreciar algunas armas y materiales confiscados, voy hacia Santos, el es muy conversador, pero se ha quedado en silencio mientras yo me movía por la instalación.
Le pido que me cuente sobre su proyecto educativo y con orgullo comparte una experiencia. Era un día de encuentro con los estudiantes de la primaria Conrado Benítez, una pionera le pide que cuente alguna operación en la que él haya participado y regresamos al año 1967… cuando era oficial operativo.
Por azar va a la finca de un chino, cerca del reparto previsora, que en unos terrenos abandonados sembraba y vendía frutas y viandas. Mientras esperaba ser atendidos llegó un auto elegante y dos individuos que entraron, dejaron algo al final del patio y se fueron, su olfato de investigador lo hizo apuntar la matrícula del auto de marca Mercedes-Benz, lujosos y caro para la época.
Comenzaron las investigaciones y el extraño chino era un oficial de la oposición de su país, que vino como emigrante y pagado por el gobierno de los Estados unidos, estaba reclutando exmilitares del gobierno de Batista, para perpetrar un levantamiento armado contra Cuba, desde adentro.
Una vez investigado el caso, procedieron al registro y debajo de los cultivos había un arsenal de armas, explosivos y altas cifras de dólares americanos para reclutar seguidores.
Su trabajo operativo organizó la acción y posterior detención del chino, librándonos de un enfrentamiento con armas y su asociado derramamiento de sangre.
La emoción de revivir aquella adrenalina y energía entrecorta su voz, y llena de emoción su rostro surcado por los años que blanquearon ya su cabello, pero quiero saber más, ¿bueno qué dijeron los niños al finalizar la historia?
Gratitud
La niña que le pidió que contara, se salió de la fila, fue y lo estrechó en un abrazo y le dijo: Gracias profe, que Dios lo bendiga.
Con esas vibraciones en el aire me atrevo a llamar a Santos como el comandante llamó a sus compañeros: Hombres y mujeres color del silencio, de manos limpias y corazón ardiente, para todos ellos nuestra gratitud por sus desvelos, por estar en primera línea para defender la paz y nuestros sueños.