La cultura como baluarte indispensable de la vida, continúa floreciendo en cada corazón comprometido con lo justo, lo humano y lo que nos hace cubanos. Por eso el homenaje al trabajador de la cultura no pasó por alto en la Oficina del Historiador de la ciudad de Camagüey.

Entre poemas, canciones y rumba de la buena, se compartió para también reconocer a los que con su acción han contribuido a edificar una parte de nuestro patrimonio cultural.

Se le entregó la medalla XX aniversario que confiere la Oficina del Historiador, al arquitecto Alexis Souto Amador, por su consagración y sobrados méritos en la preservación de la memoria material y espiritual en la provincia. Además, la institución confirió por primera vez el reconocimiento Defensor de Memorias, a cuatro camagüeyanos que contribuyeron con sus donaciones, durante el año, a enriquecer los fondos del Archivo y Museo Ferroviario, de la institución.

Se sumó a la jornada de homenaje, el Instituto de Ciencias Médicas Carlos J. Finlay que reconoció con la distinción 40 Aniversario, a la Oficina del Historiador y a su director, José Rodríguez Barreras.

Como uno de los galardones más importantes que otorga el Sindicato nacional de Trabajadores de la Cultura, apuntando trayectorias laborales meritorias; recibieron este año la Medalla Raúl Gómez García, por más de 20 años: José Rodríguez Barreras, Fernando Crespo Baró, Alba Rosa Colina Morciego y Mayra Pérez Salas.

Mientras que la Central de Trabajadores de Cuba y el Sindicato nacional de los Trabajadores de la Cultura determinaron conceder la Condición de Colectivo Distinguido a nivel de país, a la Oficina del Historiador de la ciudad, por los resultados de trabajo durante el 2020. Dentro de ellos se destacan el Premio en el Festival nacional de la Prensa, las labores en el enfrentamiento a la COVID y la atención a la población.