El joven Proyecto Lianet Dance, ya cuenta con 22 niños y adolescentes, que nos deleitan con sus coreografías. Observando una de ellas, me llamó la atención una niña que es la que más sonríe y disfruta al bailar, tanto, que parece una bailarina profesional. Su nombre es Duigna y nadie pensaría que, siendo muy tímida, superó sus miedos a través de la danza.
Bailaron un popurrí de música popular, tan elegante y a la vez tan animado, que hasta los menos dados al baile marcaron con palmadas el ritmo. Fue durante un matutino especial por el 4 de abril, en la sede de la Oficina del Historiador de la ciudad de Camagüey (OHCC); quedé entonces con “el alma divertida”, como dice la letra de un viejo son del Septeto Ignacio Piñeiro.
Por eso, al terminar la presentación, fui al encuentro del grupo, para conocer sobre la labor de esta instructora de arte de la Casa de la Cultura Ignacio Agramonte, Lianet Herrera Pérez, quien comenzó con 5 niños el montaje de su opera prima: “Catrina”, con la que terminó ganando el premio Olga Alonso y abriendo su escenario para todos los pequeños con deseos de iniciar el camino de la danza.
Historia
Mucho ha crecido la agrupación en solo 12 meses de intenso trabajo. Algunos de los chicos fundadores, los que ese día bailaron en la sede de la OHCC, así lo confirmaron; mientras posaban para una foto en el patio, porque era su primera vez en la institución y constituía un deseo pendiente, por tanto, les hizo mucha ilusión ser invitados.
Así, Julio César, Duigna, Lurisleidy y Jazmín; progresaron en habilidades y soltura. Hoy, son parte de casi todo el repertorio del proyecto, que transita por música infantil, contemporánea e internacional; siempre destacando la sabrosura de los ritmos cubanos.
Una de sus más versátiles bailarinas es Estefany, que no tenía todas las aptitudes por su falta de soltura, pero con trabajo y ensayos fueron aflorando habilidades innatas y ahora podemos verla danzar tras sus sueños.
La sede de Lianet Dance, la Galería Alejo Carpentier, es testigo de la preparación técnica y coreográfica. Quince bailes del repertorio ofrecen preparación para los que no tuvieron oportunidad de ingresar antes a una escuela de arte, y quieren continuar estudios profesionales, allí aprenden a amar el baile y estudian para exámenes de enseñanza superior.
A aquel grupo inicial se fueron uniendo aficionados, hasta crecer tanto que la compañía se divide en 2 etapas: la primera, compuesta por niños entre 6-10 años, y la segunda, para adolescentes entre 12-16 años de edad.
Primer aniversario
EL Proyecto Lianet Dance celebró su primer cumpleaños el pasado mes de enero, con una gala en el teatro Avellaneda. Uno de los momentos más emotivos fue ver a la profesora compartiendo escenario con sus pupilos, oportunidad que deseaban sus alumnos, y que fue cumplida con el baile de un merengue, para cerrar el espectáculo.
Alegría y belleza transmiten las coreografías de estos jóvenes amantes de la danza y las tradiciones de baile, que no solo enseña técnicas danzarias, sino que permite el crecimiento artístico y personal de niñas como Duigna y Estefany, quienes superaron sus miedos y hoy disfrutan, como flores al viento, de esa hermosa habilidad que puede ser tan sublime: la danza para el alma divertir.
