El día anterior a los sucesos del 26 de julio de 1953, la ciudad de Camagüey fue testigo discreto, del paso por carretera de 80 de los asaltantes a los cuarteles, Moncada y Carlos Manuel de Céspedes. Por el ferrocarril otro grupo continuaba camino, entre ellos Raúl Castro.
Por estos días en que recordamos la heroica gesta del Moncada, a veces parece borrarse en el tiempo el paso de los revolucionarios la ciudad. Por tales motivos rescatamos estas huellas que me llevaron hasta la pizzería Los Venaditos, donde una nota curiosa permanece en la memoria de sus trabajadores y es poco conocida por la población.
El menú
Fidel junto a tres compañeros, hizo una pequeña escala para almorzar en la antigua fonda de Manolo, hoy Los Venaditos, ,el cocinero Jesús Figueredo, personalmente les sirvió la mesa con lo más criollo que ofrecía la casa: masas de cerdo fritas, arroz congrí y yuca con mojo, acompañado de cerveza Hatuey.
Una foto guardó el momento en secreto y solo vio la luz años después, cuando ya el comandante era noticia desde la Sierra Maestra. La imagen ocupa un sitial de honor en el actual restaurante y el tema enorgullece a sus colectivo, que cada 25 de julio ofrece un plato espacial que nombraron el menú del Comandante, para rememorar aquella secreta visita a la tierra de El Mayor, una tarja de bronce a la entrada del salón da fe de ello.
Según Ramiro
Después de conversar con el joven colectivo de la pizzería y en especial con el jefe de turno, Miguel Cossío, llegó muy a tiempo el combatiente Ramiro Hernández Serrano, vecino del lugar, quien a sus 84 años es asiduo visitante y ferviente seguidor de la historia, por lo que se dedicó a recopilar datos sobre la breve visita de Fidel a la “Fondita de Manolo” y nos compartió los detalles.
Manolo parece que era simpatizante de la revolución naciente, aunque se mantenía al margen, muchos piensan que el sabia a quienes esperaba aquel día para almorzar, pero fue prudente con la información, murió en los primeros años de la década del 60, por lo que no hay ya descendientes cercanos ni más información que la del cocinero Jesús.
El preparó aquellos alimentos con buen gusto y vivió hasta hace poco, para contar con orgullo sobre la visita, la cual es rememorada con los vecinos, pioneros y combatientes del reparto Garrido en una gala político cultural cada 25 de julio. Este año por la pandemia la tradición queda pospuesta.
Recordatorio
La parada de los revolucionarios en Camagüey, aunque fuera para un almuerzo prudente en la fonda de Manolo, guarda el aporte de muchos coterráneos, que exponiendo su vida, armaron revueltas en las salidas del territorio, para desviar la atención de los soldados del dictador y permitir el paso de los moncadistas hacia el Oriente.
Años después esta acción sería recordada como nuestro tributo para desarrollar la heroica gesta, que dejó radicalizado el pensamiento revolucionario de la juventud cubana.