Hace solo unos meses sentí una de las emociones más fuertes de los últimos tiempos, cuando tuve la posibilidad de asistir a nuestro coliseo mayor, el Teatro Principal ,para disfrutar de la puesta en escena  de la obra ‘’Cantata’’, interpretada magistralmente  por nuestro Ballet de Camagüey, acompañado por la Orquesta Sinfónica y el Coro Provincial, con la valiosa colaboración del Coro de la vecina Ciego de Ávila, que vino a regalarnos uno de los momentos más especiales vividos por los camagüeyanos desde hace algún tiempo, desde mi modesta opinión como espectadora.

Quien como yo tuvo la gran oportunidad de ver su estreno, hace ya tantos años, exactamente en el lejano 1971, sabe que, aunque hayan sido otros sus intérpretes, su equipo técnico y artístico, este, el que disfrutamos en abril, fue algo extremadamente novedoso y concebido con una osadía extraordinaria, pues también, quién imagina, como yo, los sacrificios y dedicación a los que se vio sometido el sector de la cultura fundamentalmente ,para llevar a cabo tan suntuosa puesta, valora mucho más lo que nos ofrecieron con un éxito rotundo.

Desde que traspasamos el lobby y subimos la escalera se iba notando la expectativa de lo que veríamos, pues los antecedentes eran fuertes, sin embargo, el resultado fue increíble, pues el valor agregado de la música en vivo, con aquellos solistas respaldados por la Sinfónica, hicieron retumbar las paredes del teatro para en un aplauso final ovacionar a tan magnificas ejecuciones.

Experiencia en nuestros corazones

Estoy segura como yo, muchos rememoramos, pero también, vivimos y nos deleitamos con esta nueva entrega, que hizo que nuestros corazones latieran con mayor prisa, y de allí salimos con el orgullo de haber asistido a uno de los hechos artísticos más completos de los últimos anos en nuestra ciudad agramontina.

Enhorabuena para nuestra compañía de ballet que demuestra día a día su preparación y rigor profesional, y también para las demás agrupaciones que se lucieron dándonos muestras del buen hacer artístico.