Sabino Pupo Milián nació en la provincia de Oriente en 1895, en el seno de una familia humilde. Desde su niñez se dedicó a las labores agrícolas junto sus hermanos.

Para el año 1943 partió a Camagüey, donde levantó su hogar en tierras realengadas en Camalote, allí tuvo que enfrentar las presiones de los terratenientes que trataban de obligar a los campesinos al pago de rentas.

A raíz de este hecho los agricultores realizaron una protesta, con el argumento de que dichas tierras le pertenecían al Estado y por tanto no se encontraban en la obligación de realizar un pago para su labrado.

Por todo esto Sabino Pupo mostró siempre su inconformidad con la situación de los hombres de su clase, convirtiéndose en un líder del campesinado. Más tarde se vinculó a la asociación campesina “Álvaro Reynoso” constituida en la zona donde vivía.

Una vida dedicada al campesinado

Años más tarde, marchó al sur en la búsqueda de tierras más fértiles, arrastrando consigo a varias familias campesinas. Llegó a instalarse en un nuevo asentamiento, que también era terreno de interés de la compañía estadounidense Manatí Sugar Company.

Al ubicarse Sabino en el sitio, la propia compañía comenzó una serie de presiones para lograr que los campesinos abandonaran el lugar.  Rápidamente se organizó una oposición por parte de los asentados organizados y liderados por Pupo Milián para evitar el desalojo. En septiembre de 1948, Pupo aceptó el puesto de presidente de la asociación campesina a la que estaba vinculado a propuesta de sus compañeros, quienes vieron en él una figura firme e insobornable.

El 20 de octubre de 1948 fue asesinado en Camalote el destacado líder agrario. Tan pronto se supo de la triste noticia sectores obreros simpatizantes con la causa del campesinado se movilizaron para llevar el cadáver a Nuevitas con el fin de rendirle tributo.