Pues sí que en este 2024 nuestra ciudad sigue ajetreada con los trabajos por el aniversario 510 de su creación, y vemos paredes que ayer estaban solo en repello, ya pintadas de un día para otro; obras que avanzan, tratando de ganar tiempo al tiempo, para tenerlo todo listo antes de los primeros días de febrero y lograr los propósitos que nos hemos planteado.
Son muchos los retos, a menos de un mes los camagüeyanos tenemos compromisos muy fuertes que cumplir con nuestra añeja Villa, pero la sola satisfacción de ver los resultados finales nos impulsa a todos a, si es preciso, no dormir para conseguirlos.
No solo las acciones constructivas son los compromisos, no, también la preservación de valores como la laboriosidad, la cooperación, la solidaridad y el buen hacer; son acicates para celebrar este nuevo aniversario y de esa forma contribuir a que las nuevas generaciones los incorporen, y sepan valorar cada logro, cada símbolo de identidad, cada empeño por enaltecer la ciudad y sus tesoros.
Por eso ya de vuelta a las faenas, después de unos días de receso y comenzando un nuevo ciclo, nos esforzamos para que el advenimiento de este festejo sea también un digno ejemplo, y podamos verdaderamente honrar la campaña que nos hemos trazado y sentir como propio el slogan: “Camagüey, orgullo que nos define”.