La Sociedad Filarmónica de Puerto Príncipe, hoy Camagüey, agasajó a la escritora Gertrudis Gómez de Avellaneda como Socia de Mérito y el día 3 de junio de 1860, en la casa de los marqueses de Santa Lucía, en Cisneros esquina Martí, a las 9 de la noche.
A las nueve de la noche, en coche y escoltada por un grupo de señoras, llegó la Avellaneda a la Sociedad donde la esperaban 12 caballeros con hachones encendidos. La Marquesa de Santa Lucía y otras damas principales la esperaban en la escalera y le entregaron flores. Ya en el primer piso de la morada, se entregó a la homenajeada una corona de flores blancas con el diploma que la acreditaba como Socia de Mérito.
¿Cuál fue el programa?
El investigador Ciro Bianchi refiere que hubo música de Rossini y otros autores. Entre discursos y poemas el hermano del Cucalambé, Antonio Nápoles, fue presentado. También se leyeron estrofas de la autoría del poeta esclavo Juan Antonio Frías.
Apunta Ciro, el tiempo del programa, un tanto extenso, como consecuencia la homenajeada, Gertrudis, luego de hablar sobre su amor por la tierra que la vio nacer y evocar la memoria de su madre, que duerme «su sueño eterno en un lugar que no cubren las palmas ni las cañas del trópico y cuyas flores no serán regadas por las aguas del Tínima», pidió volver a la casa donde se alojaba.
No obstante, los principeños, apuntó el intelectual Roberto Méndez, no eran fáciles de desanimar. Aun en ausencia de la homenajeada, cantaron para su propio placer el tercer acto de Hernani, previsto para cerrar la noche, devoraron el suculento bufet encargado para la fiesta y bailaron como locos hasta las dos de la mañana.
Trascendencia
Gertrudis legó su obra, su pensamiento y espíritu contestatario, transgresor y sincero.
“Lo más escandaloso en la Avellaneda, todavía hoy, no es su vida íntima, sino su condición de escritora, resuelta monumental, que produjo la obra lírica, narrativa y escénica más extensa y resistente de nuestras letras hasta 1870. No solo es la poetisa más importante del siglo XIX ꟷlo cual sería un débil honor para ellaꟷ sino una de las figuras claves del romanticismo americano y quizás de ellas, la que mejor apunta como larvada precursora de la rebelión modernista.” Méndez, Roberto (2016).
En el Camagüey, un teatro de un bello eclecticismo lleva su nombre, edificado en la calle en que nació, que lo porta también. Igualmente inicia esta arteria una escultura inspirada en su impronta social, además de centros educacionales honran su memoria.
Bibliografía
Bianchi, Ciro (2021) “Las coronaciones de la Avellaneda” en Juventud Rebelde digital, 25 de septiembre 2021. [Recuperado 1 de junio de 2022.]
Méndez, Roberto (2016) “El legado de Gertrudis Gómez de Avellaneda” en Cubarte 27 de octubre de 2016. [Recuperado 1 de junio de 2022.]