En respuesta a la intención de dotar a cada cabecera provincial de una institución educativa no solo de grandes proporciones, sino también de un centro destinado a la especialización y preparación de sus estudiantes en las ciencias exactas, fue creado en Camagüey el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas Máximo Gómez Báez (IPVCE) -el segundo de estos significativos centros de enseñanza.
Su inauguración se produce el 1ro. de septiembre de 1976, coincidiendo con el inicio del curso escolar de ese año. En dicha apertura, Fidel pronunció un discurso en el cual la califica de “maravillosa” y exalta el trabajo de los constructores camagüeyanos, como afirma Meylis Cruz Fernández.
Valor arquitectónico
Si bien en la actualidad -según Alina Santana Ortiz- ha perdido parcialmente algunos de sus valores originales, debido entre otros factores al poco mantenimiento del edificio y las transformaciones erróneas (provocados, a su vez, por el desconocimiento de algunas instituciones y de la población de los valores de su arquitectura) este impresionante centro culminó el proceso progresivo de maduración arquitectónica, basado en la suma y verificación de las experiencias anteriores.
Por ello, su significación para el contexto local y nacional es evidente. De ahí la necesidad de una consciente rehabilitación.
La estatua ecuestre de Máximo Gómez
En la entrada principal que da acceso al núcleo central del IPVCE, como también se le llama por sus siglas, compuesto por edificios de una mayor complejidad en su geometría y concentración de volúmenes, según explica Santana Ortiz, se encuentra ubicada una estatua ecuestre del Generalísimo, obra del escultor Delarra, en conjunto con la plaza ceremonial.
Es válido mencionar que este artista habanero es también el autor de otros importantes monumentos, entre los que sobresale el del Che perteneciente al conjunto escultórico ubicado en Santa Clara.
A lo largo de los cursos escolares, se ha convertido en todo un símbolo de legitimidad para el estudiante vocacional, enmarcado en una fotografía que no puede faltar.
Logros y reconocimientos
En 47 años, por sus resultados, dicha institución ha recibido reconocimientos y condecoraciones nacionales e internacionales. Destacan los premios alcanzados por sus alumnos en las olimpiadas internacionales en asignaturas como Química, Biología, Física y Matemática.
Conclusiones
Sin duda alguna, la importancia del Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas Máximo Gómez Báez trasciende los planos educativo, arquitectónico y patrimonial, al convertirse en todo un referente que enaltece a la provincia en el ámbito nacional.
Bibliografía:
– Cruz Fernández, Meylis. La imagen de los “vocacionales”. www.adelante.cu, 1ro de septiembre de 2017.
– Santana Ortiz, Alina. Escuela Vocacional “Máximo Gómez”. Arcada. Revista de conservación del patrimonio cultural 6(2), 1-11. 2018.
