Urgencia, necesidad y deber sobre las pinturas murales de Camagüey. Policlínico Docente “José Martí”.

Foto: Archivo OHCC
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Por: Carlos de Jesús Hernández Fernández y Gisell B. Pons Aguilar

La conservación y restauración de monumentos[1] se ha ido desarrollando y perfeccionando en los últimos decenios. La Zona declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad de la ciudad de Camagüey,contiene una arquitectura representativa de la idiosincrasia camagüeyana. A su vez, agrupa la mayor cantidad de inmuebles de valores excepcionales y relevantes, expresados a través de sus diferentes etapas históricas, arquitectónicas y culturales visibles; ya sea de manera individual o formando conjuntos, de ahí que resulte de vital importancia su preservación o reanimación.

En las calles principeñas se encuentran edificaciones de gran relevancia patrimonial,por sus valores históricos, arquitectónicos y artísticos;pero algunos elementos han quedado ocultos a la vista de la población, como es el caso de las pinturas murales.

Las primeras referencias históricas del inmueble que ocupa actualmente la Policlínica docente José Martí, ubicado en la calle Ramón Guerra # 52,lo ubica como las casas que formaban un lote de manzana frente a la plaza de Francisco de Asís, en el año 1772[2]. Se conoce que desde el siglo XVIII la manzana estaba parcelada en tres lotes, pertenecientes a diferentes propietarios[3].

Para el año 1813, luego de la venta realizada a Tomás de Cisneros,quedaron todas integradas al cuerpo principal de la casona con frente a la plaza;años posteriores, fueron asumida por Tomás Pío Betancourt[4].En 1921 su hija, Doña Dolores Betancourt, lo cedió a la Orden Salesiana para un colegio de niñas pobres.A partir de 1961 la edificación mantuvo su uso educativo, como sede del Instituto de Perfeccionamiento Educacionaly del Centro de Documentación e Información Pedagógica. Luego de ser intervenido,fue objeto de un cambio de uso,asumiendo su función de policlínica.

La edificación se distingue por su monumentalidad y por constituir una manzana en sí, en el entorno del Parque Martí. Es uno de los pocos ejemplares de casas con portal que dan a plazas, dentro del Centro Histórico[5]agramontino. En el conjunto prevalecen elementos coloniales, como su techo dearmadura, arcos mixtilíneos y pinturas murales; aunque su fachada presenta influencia ecléctica,a pesar de la apariencia unitaria. En él se evidencian las tres construcciones que le dieron origen.

Las pinturas murales

Las ornamentaciones murales de nuestras edificaciones coloniales reclaman un amplio y profundo trabajo investigativo. Se plantean diversas hipótesis,como las referidas a su carácter popular, a la influencia de las clases dominantes y a las de las metrópolis europeas; la identidad de sus autores, el estudio de colores, armonía cromática, diseños y motivos ornamentales; técnicas y materiales.

En el caso de la Policlínica José Martí, producto al precario estado de conservación del inmueble, en el año 2023 se retoman acciones para su mantenimiento.Como parte de esta intervención y estando cerca el Aniversario 510 de la fundación de nuestra villa, se retomaron las acciones para la conservación de la pintura mural de este inmueble.

La obra pictórica en sí es una cenefa a nivel de piso, con motivos florales. En la parte superior tiene franjas horizontales paralelas de color negro y azul marino, respectivamente. En ellas se encierran detalles florales en forma de ramas, con color ocre, verde y rojo; dispuesto sobre un fondo gris claro. En la parte central resalta una franja de color rojo con óvalos de color ocre y detalles florales alrededor de estos. En la parte del zócalo-remate de cenefa[6]-predomina un fondo de color ocre con rombos, que encierra jarrones con arreglos florales.

Si tenemos en cuenta el mal estado de conservación en que se encuentran muchas edificaciones y gran parte de las decoraciones murales conocida, el elevado número de edificaciones pendientes de ser investigada y restauradas, así como el peligro que corren de ser destruidas o seriamente dañadas por quienes las desconocen o ignoran su valor; urgen acciones para su salvaguarda.

[1]Monumento (del latín monumentum “recuerdo” “erección conmemorativa”“ofrenda votiva”), es toda obra con suficiente valor para el grupo humano que lo erigió. Inicialmente se aplicaba a las estatuas, inscripciones o sepulcros erigida en memoria de un personaje o acontecimiento relevante (monumentos conmemorativos), su uso fue extendiéndose llegando a comprender cualquier construcción que posea valor “artístico, arqueológico, histórico”; destacadamente las arquitecturas que, enclavadas en un núcleo urbano o asilada en el medio rural, cumplen la función de hito por su visibilidad y se convierten en símbolos de ese lugar.

Estado de conservación de las pinturas murales durante la intervención constructiva del inmueble.

Planta actual del segundo nivel de la edificación. Localización de las pinturas murales ( líneas en rojo —).

[2]Crespo Baró, José Fernando (Mayo 2008). Antonio. L. Luaces 1-3. Departamento de Investigaciones Históricas. Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey.

[3] Guía de arquitectura y paisaje. Camagüey- Ciego de Ávila. Colectivo de autores.2009.

[4] Conocido como el primer historiador de la ciudad de Puerto Príncipe.

[5]Catálogo de grado de protección 1 del inmueble. Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey.

[6]Se da la dimensión total entre el límite del zócalo y el borde inferior de la cenefa de remate.

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