El 4 de julio de 1949, se funda la Delegación de Camagüey como parte de la Federación Democrática de Mujeres Cubanas. En la casa situada en la calle Oscar Primelles número 558, cuarenta y nueve camagüeyanas discutieron, aprobaron el Reglamento nacional y la directiva que dirigía su destino durante el bienio 1949-1951.
La mesa estuvo presidida por Julia Heredero Lastra y como secretaria la conocida líder política del Partido Socialista Popular y del Partido Comunista Felicita Ortiz Córdova.
La candidatura presentada y aprobada estuvo compuesta por una presidenta, 6 vicepresidentas. Una junta de secretarías y su vice correspondiente: de la organización, de actas y correspondencias, de propaganda, de finanzas.
Como sigue: Presidenta: Julia Heredero Lastra, 1ra. Vicepresidenta: Felicita Ortiz Córdova, 2da. Arminda González, 3ra. María Novoa, 4ta. Adela Arango, 5ta. Catalina Rodríguez, 6ta. Georgina de Urra Parrado y como secretarias: Julia Benemelis Vázquez con Ascensión Gregorí; Flora Morales Varona con Longina Cuba Viera; Zoila Molina Betancourt con Adelina Landrián; Rufina Gómez expósito con Dulce Criado Diago. Además un cuerpo de doce vocales.
Prácticas políticas desempeñadas
Se sistematiza un acceso paulatino a los espacios políticos y de gobierno, en su participación como concejales, miembros y líderes de partidos de izquierda, profesionales y movimientos sociales.
Comenzaron a transgredir con su participación una cultura política discriminatoria en gobiernos y partidos políticos. En consecuencia, la escasa valoración de las capacidades y aportaciones de las mujeres al ejercicio del poder político. Asimismo, ayudaron a fomentar desde esta plataforma asociativa programas que promovieran la participación de las mujeres, y demostraron que la mujer no solo es útil para el cuidado de su familia.
Se visibilizó a la mujer en propagandas políticas en la prensa plana, sus voces de alcance social en la escritura, la radio, las ciencias, en la instrucción democrática, inclusiva y gratuita.
Estas mujeres fueron ejemplo de no aceptar pasivamente los contextos excluyentes. Convirtieron esta Federación en centro de aprendizaje contra el fascismo, la discriminación y la muerte social y política de las capas subalternas.
Se destacaron como mujeres de vanguardia, comprometidas con la democracia sistémica desde la localidad, la nación y en los reclamos internacionales de un comportamiento estructural socialmente justo.
Legado
Una ética de justicia, a favor de la igualdad y la equidad desde su propio seno y constitución de membresía y directiva. Desarrollaron además una ética de crítica desde el conocimiento y denuncia de las estructuras y dinámicas que impiden la justicia social y generan discriminaciones y desigualdades.
Se distinguieron por su desafío a los contextos al asumir como propuesta de proyecto social una sociedad que transforme patrones de comportamientos heredados y mantenidos de una cultura de privilegios y desprecio a la gente común y humilde.
Bibliografía
Archivo Histórico Provincial Camagüey: Fondo Asociaciones. Leg. 65 Exp. 5
Álbum de Felicita Ortíz Córdova al Archivo Histórico Provincial Camagüey.